¿Cuáles
son los riesgos asociados a cada tipo de escáner?
Escáner de radiación de
ondas milimétricas: Debido a que no emite radiaciones ionizantes, sino sólo
ondas electromagnéticas del rango de radiación del teraherzio y de escasa
penetración, estas ondas no son capaces de alterar moléculas o átomos del
cuerpo humano y no existen evidencias de que represente peligro alguno
para la población.
Escáner de Rayos X de
retrodispersión. Si bien emite rayos X (radiación ionizante capaz de provocar
cambios en moléculas o átomos del cuerpo humano), éstos son de escasa energía y
la dosis de radiación emitida es mínima. De hecho, una sesión de escáner
de aeropuerto equivale a 15 minutos de radiación natural (recordemos que
estamos constantemente expuesto a radiación cósmica). Para que la dosis de
radiación de un escáner de aeropuerto llegara a la dosis de una radiografía de
tórax una persona tendría que pasar 1.000 veces por él. Si lo comparamos con la
dosis de radiación recibida en una TAC haría
falta pasar alrededor de 100.000 veces por el escáner del aeropuerto para
recibir una dosis equivalente. Así pues, el aumento de riesgo de cáncer por
utilizar este escáner es prácticamente nulo.
Un último dato, ¿sabían
que la dosis de radiación recibida en 30 horas de vuelo equivale a una
radiografía de tórax? ¿Por qué hay tanta gente obsesionada por la
radiación de los escáneres y no por la radiación de los vuelos (que, pese a ser
mucho mayor, sigue siendo segura, aunque los que viajan con mucha frecuencia o
la tripulación deben tener en cuenta este factor)? En fin, paradojas del ser
humano y su parcial percepción del mundo.